Con la vuelta de vacaciones, he aprovechado para recopilar y ordenar algunas de mis colaboraciones en distintas publicaciones. Me gustaría compartir algunas reflexiones que hice para el primer número de la revista Filantropía, en septiembre de 2012.

El artículo abordaba la encrucijada en la que se encontraba, se encuentra, el tercer sector ante el recorte de las subvenciones y los insuficientes donantes individuales. En el dosier me atreví a enunciar 4 consejos para las ONGs que quiero aprovechar para reproducir aquí.

1. Buscar lo que es esencial. ¿Qué es lo que hago bien y en lo que aporto valor? Eso supone cerrar, modificar o reinventar programas.
2. Perder protagonismos a favor de la causa. Si nos juntamos ganaremos en impacto, en sinergias, en economías de escala. Se necesitan concentraciones y fusiones de entidades, así como acuerdos de colaboración público-privada y entre las propias ONG.
3. Implicación social y voluntariado de proximidad. La gente se debe poner manos a la obra para ayudar al vecino: intercambio de servicios, trueque, segunda mano, etc.
4. Buscar nuevas vías de financiación a través del ofrecimiento de nuevos servicios y el emprendimiento social.

Ahora que empieza el curso y, junto a los coleccionables anunciados en la tele, nos hacemos buenos propósitos, espero que estas recomendaciones sirvan a las organizaciones a seguir cumpliendo con sus objetivos a favor de las causas.